Los últimos avances tecnológicos en medicina veterinaria nos confirman que estamos viviendo un cambio sísmico en el sector. El surgimiento de nuevos dispositivos, como los wearables, las radiografías digitales o las mejoras en diagnóstico por imágenes, ofrecen a los profesionales un gran apoyo para mejorar el diagnóstico veterinario.

Sin embargo, se avecina un cambio aún mayor liderado por la inteligencia artificial, que ya se aplica en muchos aspectos de nuestras vidas (como en las redes sociales o en los buscadores). ¿Qué efectos tendrá la inteligencia artificial en la medicina veterinaria? ¿Es posible que ya se esté empleando en nuestro sector?

 

¿Quieres conocer las 11 Tendencias que revolucionarán el sector veterinario a medio y largo plazo? Haz clic y descubre cómo optimizar tu clínica para 2022

 

Qué es la inteligencia artificial en medicina veterinaria

La inteligencia artificial consiste en simular la inteligencia humana a través de algoritmos para que sea capaz de tomar decisiones. Gracias a sus características, estos algoritmos pueden evolucionar muy deprisa y ayudarnos a resolver problemas específicos para apoyar nuestros diagnósticos.

De hecho, este tipo de tecnología tiene una alta capacidad de aprendizaje basándose en su experiencia. Por ejemplo, a través de la información de centenares de análisis de sangre, puede detectar patrones y llegar a una conclusión acertada. 

De hecho, la inteligencia artificial tiene una relación muy cercana con el big data, que también está entrando con fuerza en el sector de la veterinaria.

 

Usos y ejemplos de IA en veterinaria

A pesar de que todavía es el inicio de los avances de la inteligencia artificial en veterinaria, desde la década de 2010 varios investigadores ya han empezado a testear para encontrarle sus usos prácticos. 

Por ejemplo, uno de sus empleos es en la detección precoz. En una investigación conducida por investigadores de la Universidad de California, la inteligencia artificial identificó a nueve perros que dieron positivo en leptospirosis (100% de sensibilidad) y también acertó con un 90% de sensibilidad los perros que dieron negativo (fuente: Animal’s Health).

Otro estudio, donde destaca su efectividad en el diagnóstico veterinario, fue conducido por Krystel Reagen, del Hospital de Enseñanza Médica Veterinaria de California. Reagen ayudó a desarrollar un algoritmo para detectar la enfermedad de Addison de los perros, y consiguió una tasa de precisión superior al 99 %. El algoritmo se basaba en 1000 análisis de sangre, con el que pudo descifrar el patrón de la enfermedad (fuente: Diario Veterinario).

Sin embargo, hay muchas otras áreas de la medicina veterinaria donde la inteligencia artificial también tendrá un papel destacado en un futuro próximo, como en la radiografía o en la medicina preventiva.

 

New call-to-action

 

Una mirada positiva al futuro con los algoritmos

En definitiva, a pesar de que la inteligencia artificial todavía esté en pañales en el campo de la medicina veterinaria, poco a poco vemos diferentes avances que auguran un futuro muy positivo en el sector.

Gracias a la ayuda de los algoritmos, los veterinarios podemos emplear esta tecnología como apoyo en nuestros diagnósticos y encontrar soluciones rápidamente a problemas complejos. La inteligencia artificial tiene mucho potencial en el campo de la veterinaria… ¡Pero todavía queda mucho camino para aprovechar sus ventajas al cien por cien!

 

New call-to-action

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *